Soñándote me quedo,
suspirando tu nombre al
viento.
Por más que intento no
puedo,
ahogar lo que siento.
Oscura está la alcoba del
infierno,
donde suenan tristes lamentos.
La tentación se abre paso
y seremos,
caricias prohibidas en
nuestros dedos.
Por este infernal deseo eterno,
descendí para encontrarme
contigo,
a este submundo incierto.
Dulce cosquilleo embriaga
mi ombligo,
me pierdo en las sombras
del desconcierto,
Los demonios, miran desde
el postigo,
nuestro magistral concierto…….Tears.